Maques y Lacas
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Productos con técnica de origen prehispánica y posterior influencia europea, son preciados artículos que básicamente se trabajan sobre una base de madera y son elaborados desde fechas inmemoriales en las regiones de Uruapan y Pátzcuaro con menor producción en Quiroga apreciando este fino y laborioso trabajo sobre guajes, bateas, cofres, biombos, miniaturas, joyería con motivos de la época de la colonia y contemporáneos, casi siempre reflejando flora y fauna locales.
Para la elaboración, se emplean materiales como salea de borrego, pinceles de pelo de perro, aceite de linaza, ajo y brochas. El proceso comienza lijando la batea, separando el polvo resultante para cubrir cualquier imperfección en la superficie. Luego, se prepara una mezcla de aceite con tierra colorada molida, que se aplica con la salea de borrego sobre toda la batea, tanto por dentro como por fuera, y se deja secar. Posteriormente, se barniza el interior de la batea para darle un acabado negro, y se deja secar nuevamente.
Para crear una pieza terminada, se necesita la habilidad de varias manos. Primero, quienes fabrican el plato o el mueble con maderas de aile, madroño, tzirimo, cedro, parota o pino de primera calidad. Luego, quienes laquean la pieza con laca automotiva, en lugar de maqueado tradicional. Después, el maestro artesano que la decora, y finalmente, quien la protege con una capa de resina, necesaria si la pieza se usará regularmente.
Los motivos decorativos se dibujan con una pasta mordente sobre la superficie ya laqueada. Tras secar durante un día, se aplica una hoja de oro que se adhiere a la pasta. Finalmente, el decorado se completa con pinturas al óleo, dando como resultado una obra exquisita y duradera.